Disfruta esta fácil y económica receta para hacer tus propios ácidos lácticos en casa y verás como queda rica y estiradita tu piel.
Disfruta esta fácil y económica receta para hacer tus propios ácidos lácticos en casa y verás como queda rica y estiradita tu piel.
El secreto de belleza del día de hoy consiste en unos concentrados de ácido láctico congelados que se usan todas las mañanas en el rostro.
El ácido láctico es uno de nuestros mejores aliados a la hora de hacernos lucir bellos y jóvenes.
Retarda el envejecimiento y con esta receta también le hacemos la guerra a las bolsas que se forman debajo de los ojos.
Ayuda a relajar el rostro, sobre todo si sufres de insomnio, lo cual provoca que a veces amanezcas con un rostro cansado.
Esta concentración ayuda mucho en una rutina diaria de belleza, ya que son muchas las bondades que este concentrado de ácido láctico entrega para la belleza de la piel:
Es antiedad,
Suaviza las líneas de expresión.
Reduce el daño provocado por el sol.
Mejora la textura y el tono de la piel.
Aclara las manchas de la piel,
Suaviza y fortalece la piel,
Incrementa la producción de colágeno,
Purifica la piel,
Renueva las células de nuestra piel.
Mejora la elasticidad y firmeza de nuestra piel.
Apoya la circulación de la sangre, lo cual nos ayuda a rejuvenecer.
Cierra los poros dilatados y suaviza la piel.
Aquí podrás ver cómo preparar los concentrados de ácido láctico y cómo es el procedimiento para aplicarlos en la piel del rostro:
Este tratamiento se realiza todos los días en la mañana, durante 30 segundos, deja que la piel del rostro se seque al aire y enjuaga.
Luego si o si, aplícate bloqueador solar factor 30.
El bloqueador solar se debe aplicar siempre, para proteger nuestra piel, ya que al aplicar ácido láctico, nuestra piel se vuelve más sensible al sol.
Cuando apliques este tratamiento, espera al menos 1 hora antes de exponerte al sol.
Y si ves que no puede esperar lo suficiente antes de exponerte al sol, realiza este tratamiento en las tardes cuando veas que puedes estar tranquila y el sol no va a dañar tu piel.
Receta:
Leche.
Unas gotas de limón.
azúcar.
Preparación:
Si es leche en polvo, disolver en una tasa de agua.
O una tasa de leche liquida.
Revolver con 1 cucharada de azúcar granulada.
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Y aplicar 2 o 3 gotitas de limón.
Una vez se corte la leche.
Verter en cubetas de hielos. Meter en el refrigerador y esperar que se endurezcan.
Una vez estén sólidos los cubitos de hielo, aplicar 1 al día en tu rostro.
Y Walá! Listos tus concentrados de ácido láctico.
Escrito por: Braulio Bulgheroni