El prodigioso músico comenzó a tocar el piano “de oído”, con tan sólo 4 años, posee una trayectoria casi sin límites, es grandemente querido por
generaciones de Chilenos, desde los niños hasta los adultos, le conocemos y respetamos. En esta “Entrevista Homenaje” que revista Andrietti le realizó de manera exclusiva, el Tío Valentín (como le decimos todos con cariño) nos cuenta sobre su vida artística, su presente en la obra “Cuatro para el Bolero”, su pasión por el Boxeo y su recorrido artístico hasta el día de hoy.
Entrevista homenaje al tío Valentín Trujillo
Usted aprendió a tocar el Piano a los 4 años y desde aquella edad, no paró de estudiar y de estar inmerso en la música, ¿de dónde nació toda esta motivación musical a tan temprana edad?
Empecé a tocar el piano a los 4 años, de oído… A los 7 años realmente empecé a estudiar en el Conservatorio Nacional de Música, pero estaban todas las condiciones para que una persona con un pequeño talento, pudiera alcanzar esta gran fantasía. Había un piano en casa, mis hermanos mayores estudiaban piano también, se escuchaba mucha música en mi casa, y de ahí a que mi afición por este instrumento se hiciera una realidad.
En 1958 lanzó su primer disco como solista, titulado “Un piano con alma”, ¿en que se inspiró para componer la música y como fue el proceso de creación?
Efectivamente en el año 1958, el Sr. Rubén Nouzeilles, director del sello Odeón, creyó conveniente que yo grabara un LP (Long Play), en esa época, llamado “Un piano con alma”, pero la verdad es que no son composiciones mías, son mis interpretaciones de diferentes compositores, muchos de ellos con un gran talento, por eso es que me dieron la facultad, en Odeón de incluso escoger los temas para interpretarlos, pero no son mis composiciones.
En 1962 usted comienza a trabajar con Don Francisco en “Sábados Gigantes” y también en el programa infantil “Pin Pon” junto al actor Jorge Guerra, este sin duda fue el despegue de su carrera. Como vivió este cambio artístico, a los ritmos de la televisión y sobre todo con una figura tan potente como es Don Francisco, en un programa donde usted estuvo hasta el 2005, es decir, vivió muchos años de gloria y fama, ya que todos sabemos el peso que tuvo “Sábados Gigantes” en toda Latinoamérica.
Pin Pon debe haber sido en el año 1966 o 1967. El hecho que yo llegara a la televisión, no fue de casualidad, porque yo ya era director de orquesta en la radio Telefonía. Las radios en ese tiempo eran la gran fuente de trabajo, la televisión aún no era la gran fuente de trabajo, en la cual se transformó posteriormente. Ahora el hecho de haber trabajado con un hombre tan extraordinario como Don Francisco, me trajo toda clase de satisfacciones, hasta el día de hoy, y en lo que me quede de vida.
A pesar de que usted ha recibido un sin fin de premios a lo largo de su trayectoria, sin duda uno de los más conmovedores fue recibir los tres premios en el “Festival de Viña del Mar” en el 2010, ¿Qué sentimientos removió en usted el haber recibido tan grande homenaje en el Festival más importante de Latinoamérica y el aplauso unánime de todo el “Monstruo”? Y por lo demás lo recibió de parte del querido ex animador Felipe Camiroaga en la presencia de sus nietos.
Bueno, estamos hablando ya de casi 11 años que ocurrió eso en el año 2010, sentí una tremenda satisfacción, que me provocó unas lágrimas, absolutamente espontáneas y verdaderas, que fueron la respuesta a tantas emociones que yo tenía en ese momento. La presencia de mis nietos Roberto y Valentín tocando en el escenario, mi otro nieto Pedro cantando magníficamente, y mi hijo Roberto con sus arreglos musicales y dirigiendo también, más la presencia de mi esposa, familia, hijos y amigos, naturalmente llenó unos minutos maravillosos, de plena satisfacción.
En la vereda opuesta a la música a usted le gusta mucho el Boxeo, coménteme porque le gusta este deporte, ya que es como todo lo contrario a la suavidad del piano. ¿Siempre fue bueno para los combos?
Fui bueno para recibir combos, no tengo ningún talento como aficionado al boxeo, solamente mi admiración para esos hombres que luchan en un deporte que es, tal vez, el más duro, el más exigente, y el que reúne a millones y millones de admiradores. Afortunadamente es una lucha pareja, porque tu te enfrentas, y estás de acuerdo en hacerlo, con un boxeador que está a tu mismo nivel, con el mismo peso, en tu misma categoría… Y gana, como decía Leonel Sánchez, “el más mejor”.
Usted tiene 15 discos grabados y ha participado en muchos programas de TV, es conocido en todo Chile, ¿Qué ha sido lo más gratificante de esta carrera y lo menos grato?
Pienso que lo más gratificante naturalmente, fue mi primera grabación, aunque no figuraba mi nombre, pero sí estaba en la orquesta de Lucho Aránguiz. La más grande no lo podría decir, porque cada una de las muchísimas grabaciones que he realizado, y la verdad es que son muchísimas, tanto en Chile como en el extranjero, han sido maravillosas en su momento. Ahora tu me preguntas por la nota más ingrata que haya podido tener… Aún no la tengo, han pasado tantos años, llevo más de 70 años como músico, y espero que nunca me llegue, todo ha sido, afortunadamente, muy grato.
Actualmente participa del exitoso espectáculo musical “Cuatro para el Bolero” coméntenos ¿en qué consiste esta obra?
En “Cuatro para el Bolero”, estamos como los 3 mosqueteros, porque nosotros somos 5 músicos y ellos eran 4. Con intérpretes maravillosos como Carmen Prieto, Omar Lavadier, Fernando Otárola, que desgraciadamente ya no está con nosotros, pero sí está hoy Marcelo Salinas , Jorge Lobos, y mi persona. Realmente contribuimos, a que esta forma musical nacida en Cuba, en el año 1898, posteriormente también difundida en México, por grandes compositores de boleros, como también en Chile, para mi representados por el más grande de todos, Francisco Flores del Campo. Pueda expresarse musicalmente, de la forma más romántica para escuchar, y para bailar también.
¿Qué atmosfera se consigue en las personas al sentir las notas musicales y el ambiente cuando comienza a sonar la melodía al compas de “Cuatro para el Bolero”?
Lo que se siente y expresa realmente, son los sentimientos, desde la dulce melodía que te acaricia los oídos, hasta las bellas letras que también cooperan. El bolero y la música, en general, son un arte que nosotros llevamos en el corazón. El ser humano es muy permeable a este tipo de música, yo diría que muy pocas veces, pudiera alguien no emocionarse o sentir amor, con sus letras y melodías.
¿Cómo se siente trabajar con músicos de tanta trayectoria y calidad como los que participan en la obra “Cuatro para el Bolero?
No solamente una satisfacción enorme, si no también el placer de grabar y tener la oportunidad de escuchar tantas voces, tantos sentimientos, tantas formas de decirle al mundo, la música es hermosa, ámenla como nosotros la amamos.
¿Qué se siente que todos sus compañeros de la obra digan que han aprendido mucho de usted a lo largo de su trayectoria?
En realidad es una expresión demasiado generosa, la verdad es que hemos compartido conocimientos, pero no hay duda que la colaboración mía pudo haber sido importante en cuanto al repertorio, a la forma de llevarlo a cabo. Pero ellos aportaron el otro 50% para lograr una obra hermosa, de gran contenido y de mucho agrado.
¿Por qué las personas deberían ver la obra Cuatro para el bolero?
Si usted considera que su alma necesita una caricia, se lo brindaremos con este conjunto, si usted considera que las condiciones de amor y de ternura están en esta música, véanos, porque podrá encontrar todo eso, y mucho más.
¿Qué mensaje les daría a todas las personas que admiran su carrera y trayectoria musical?
La verdad es que no es ningún mensaje, es exactamente lo contrario, puros agradecimientos, gracias por haberme recibido por tantos años, gracias por haberme escuchado durante tantos años, gracias por haberme entregado tanto cariño, tanto amor que lo he sentido en todo Chile, y otros países también… Gracias a ustedes y gracias por esta entrevista.
Fotografías realizadas por Pablo Wilson y su arte fotográfico en menos de 30 minutos
